patrocina:

ROBERT HOUDIN

Jean Eugène Robert-Houdin fue un gran ilusionista francés, considerado el padre de la magia moderna

Jean Eugène Robert-Houdin fue un gran ilusionista francés, considerado el padre de la magia moderna.
Su apellido era Robert-Houdin y su nombre de nacimiento Jean Eugène Robert. Contrajo matrimonio con Mademoiselle Houdin, y bajo un permiso especial del gobierno francés, le fue permitido utilizar el apellido de su esposa después del suyo.
Robert-Houdin es a menudo descrito como "el padre de la magia moderna". Antes de su nacimiento, los ilusionistas realizaban sus actos en mercados y ferias, pero Robert-Houdin actuaba en teatros y fiestas privadas. También prefería vestir ropa formal, como la que llevaba el público.
Debido a su éxito, Robert-Houdin abandonó el trabajo de relojero y se dedicó a ser ilusionista, lanzando trucos nuevos y actuando incluso en su tiempo de vacaciones. Su esposa a menudo se veía involucrada en sus trucos, los cuales eran innovadores para la época, y luego tenía que revelárselos a las autoridades para evitar ser perseguido por brujería.
Durante años practicó en privado sus trucos y dedicó su inventiva y habilidad a fabricar sus propios autómatas, por los que ganó una medalla de plata en la exposición de París de 1844.
Su afición por la magia seguía creciendo y, gracias a un noble amigo suyo que le proporcionó el dinero necesario, pudo adquirir un inmueble que transformó en un pequeño teatro, y el 3 de julio de 1845, cuando tenía 40 años, presentó la primera de sus "Soirées Fantastiques", que a pesar de su nerviosismo tuvo gran éxito gracias a su novedad y calidad mágica. Poco a poco la magia de Robert Houdin conquistó París. Lo más selecto de la sociedad llenaba su teatro para asombrarse con sus maravillas.
Robert Houdin actuó casi siempre en su pequeño teatro, pero también lo hizo en Londres durante unos meses y en Escocia, Irlanda, Alemania y Bélgica.
En el año 1856 fue requerido por el gobierno francés para una misión muy especial: demostrar a los árabes de Argelia, a los que algunos "santones" llamados Marabouts incitaban a la rebelión, que la magia de Francia era más fuerte que la de ellos, para así disolver el entusiasmo de los rebeldes.
Los trucos de Robert-Houdin lograron romper la influencia de los mulá; además, los árabes comenzaron a temerle al ilusionista.
En un truco, le permitió a un árabe que le disparase con una bala marcada, pero en lugar de matarlo, hallaron la bala en sus dientes. Luego de aquella prueba, pensaron que sería capaz de hacer cualquier cosa. Robert-Houdin no fue el primer ilusionista en realizar el truco de la bala atrapada por los dientes, y muchos después de él han adaptado su propia versión del efecto.
El ilusionista realizó otro famoso truco para probar que la magia francesa era más fuerte que las técnicas locales: mostró una caja vacía con un fondo de acero que cualquiera sería capaz de levantar. Pero escondiendo un imán bajo el suelo, la hizo inamovible, "probando" que mediante su poder, podía evitar que el guerrero más fuerte la levantase. Poco después descubrió que podía hacer más impresionante al truco cuando no dijo que haría más pesada la caja, sino que exclamó que podría convertir en débil al hombre más fuerte, demostrando que era incapaz de levantar en alto una caja que un niño pequeño podría manipular.

El árbol de naranjas

Jean Eugène Robert-Houdin


Otro truco, "el árbol de naranjas", fue utilizado por el ilusionista en la historia corta de Steven Millhauser "Eisenheim The Illusionist", más tarde llevada al cine como The Illusionist (2006). Un naranjo mecánico en el que aparecían frutas y mariposas que volaban entre el público, o un experimento de telepatía en el que su hijo Emilie de 14 años con los ojos vendados describía con detalle distintos objetos entregados a su padre por los espectadores, o la más asombrosa "suspensión etérea" en la que su hijo era sostenido rígido en el aire sobre un bastón colocado bajo su brazo tras aspirar éter para que adquiriese la ligereza de este gas y pudiera flotar.




El ilusionista francés publicó dos libros en los que explica varios de sus trucos: Los Secretos de la Prestidigitación y de la Magia y Magia y Física Recreativa.